Los pensamientos de ira pueden ir acompañados de tensión muscular, dolores de cabeza o un aumento del ritmo cardíaco. Además, las expresiones verbales y físicas de ira pueden servir como advertencia a los demás sobre nuestro descontento. Las expresiones verbales incluyen gritos, discusiones, maldiciones y sarcasmo.

¿Cómo se siente el enfado real?
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